México, 2 Nov.- El diputado Manlio Fabio Beltrones consideró que más allá de que las resoluciones de la Corte son inatacables y todos están obligados a respetarlas, emplazan a reflexionar sobre lo que se debe hacer como Poder Legislativo para perfeccionar ese mecanismo ciudadano, de modo que sea un instrumento eficaz de la democracia participativa.
En su opinión, los debates de los ministros han sido esclarecedores e invitan a estudiar con detalle los argumentos expuestos en cada caso, así como analizar la legislación vigente a la luz de otras experiencias y legislaciones nacionales.
El coordinador parlamentario del PRI expresó que la consulta popular es una figura que existe en más de la mitad de los países del mundo para preguntar a la población su opinión respecto a propuestas de cambios legislativos o proyectos de gobierno.
Es decir, dijo, tiene una lógica prospectiva, no revocatoria ni retrospectiva, y así se concibió en la reforma constitucional que aprobó el Congreso con el voto de la mayoría parlamentaria requerida.
Cabe recordar que en el régimen constitucional las modificaciones a la Constitución Política se realizan mediante el Constituyente Permanente, integrado por el Congreso de la Unión y la mayoría de las legislaturas locales, indicó en un comunicado.
La Constitución establece con claridad los temas que no son sujetos de consulta popular, como el ingreso y gasto del Estado, la materia electoral y los que restrinjan los derechos humanos, pongan en riesgo la seguridad nacional o la organización y el funcionamiento de las fuerzas armadas.
Sin embargo, Beltrones Rivera reconoció que el debate sostenido por los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación evidenció la necesidad de definir desde la ley criterios aún más claros para eliminar cualquier interpretación subjetiva de la evaluación que le corresponde al máximo tribunal para determinar la constitucionalidad de una consulta.
De lo que se trata es de dar certeza y viabilidad al derecho constitucional en cuanto a la consulta popular, de modo que sea un instrumento efectivo de la democracia directa que consolide la confianza de los partidos y los ciudadanos en nuestra democracia, concluyó el también presidente de la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados.
