· Importante acudir al médico ante los primeros síntomas.
· Causada por alimentos como carne, leche y consumo de alcohol.
· Se recomienda evitar frutas cítricas y alimentos irritantes.
Causada principalmente por una mala alimentación, el consumo de alcohol y cigarrillo, la esofagitis es provocada por el reflujo de líquido que contiene ácido que va del estómago hacia el esófago, explicó el doctor Ramón Rojo López, director de la Unidad de Medicina Familiar (UMF) número 39 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Tecate.
Se trata de una irritación e hinchazón del esófago -tubo muscular que transporta la comida de la garganta al estómago-; es propiciada por ciertos alimentos como leche, huevo, frijoles, carne; el cigarrillo, el alcohol.
Señaló que algunas personas con sistemas inmunitarios debilitados por el VIH u otras enfermedades en la sangre, cirugías o radiación en el pecho -por algún tratamiento para el cáncer- y algunos fármacos, eventualmente sufren infecciones que llevan a esofagitis.
Rojo López puntualizó que la infección puede provocar llagas llamadas úlceras y síntomas que abarcan tos, dificultad o dolor para deglutir, acidez gástrica (reflujo de ácido), ronquera, dolor de garganta y disminución de apetito. En los niños pequeños los signos son dificultades en la alimentación y retraso en el desarrollo.
Explicó que la mayoría de estos problemas son causados por diferentes condiciones, por lo que es muy importante acudir a la Unidad de Medicina Familiar (UMF) cuando los síntomas duran más dos días o presenta molestias al comer, fiebre, dolor de cabeza y experimenta dolor en el pecho que dura más de unos minutos.
Finalmente, enfatizó evitar los alimentos que aumentan el reflujo como frutas cítricas, tomates y alimentos picantes; comer en más pequeñas porciones que lo acostumbrado y evitar la ingesta tres horas antes de irse a la cama; recomendó tomar las pastillas con abundante agua, mantener un peso saludable, realizar ejercicio y dejar el hábito de fumar.