Fundado desde el año de 1973, el club de servicio más antiguo de este municipio, los Rotarios realizan este tipo de actividades de manera normal y donde básicamente se busca acercar a los niños de familias estables, con aquellos que tienen más necesidades de todo tipo, hacerles ver que no se encuentran solos y que juntos se pueden ayudar.
Edson Ruiz, coordinador del grupo destaco que fueron 14 niños del orfanatorio que maneja la señora Lourdes Martínez, con quien previamente se acordó llevarles una tarde de esparcimiento fuera de su rutina, lo que se complemento con una comida especial dirigida para ellos consistente en hamburguesas y hot dogs, jugos y chocolates.
Asimismo les fueron repartidos algunos apoyos para su escuela, básicamente de zapatos tenis, algo de ropa y apoyos para sus uniformes en algunos casos.
Mientras tanto en este evento se amenizo con un concierto en vivo del guitarrista Alex Cipres, quien presento un repertorio especialmente dirigido a los niños de Rosarito, a quienes les reitero que no se encuentran solos y les recordó por medio de su arte, lo importante de mantener su fe en algo superior, en que todas las cosas pueden ser mejor si nos lo proponemos y nos esforzamos.
Al frente de esa casa hogar por los últimos doce años, Mama Lulú como se le conoce mejor a doña Lourdes, recuerda que fue su propio hijo Oscar, quien fundó este orfanatorio hace ya 17 años y por donde han pasado cientos de niños muy necesitados de Rosarito y de otras partes quienes llegan a esta casa hogar principalmente porque sus padres y familiares no pueden sostener a las necesidades de sus hijos.
“El plan es darles una mejor calidad de vida que la que tenían con sus padres o familias, brindarles mucho cariño y un ambiente propicio para su desarrollo, en donde se sientan seguros y donde puedan desarrollarse a plenitud, siempre guiados por alguien mayor dentro de la filosofía Cristiana”, reconoce Mama Lulú.
La encargada de la Casa Hogar, quien se identifica como una “Mil Usos”, explica que este orfanatorio se encuentra ubicado a un costado de la perrera municipal y se puede llegar por el histórico Cañón Rosarito, por el Rancho Las Delicias. El teléfono del lugar es el 661 11 392 y las puertas del mismo están abiertas para todas aquellas personas interesadas en colaborar.
Mama Lulú reconoce que hoy más que nunca los jóvenes se encuentran sometidos a una gran presión y sufren diversos riesgos que pueden afectar su desarrollo físico, mental y emocional, como son el mal uso del tiempo libre, las malas compañías, las pandillas y las drogas, por lo que aquí se les orienta de cómo salir adelante por ellos mismos fortalecidos en su carácter y convicciones.
“Hemos tenido varios casos que los padres de los niños los sacan pensando que van a estar mejores pero luego cuando ya no pueden con ellos nos los quieren regresar, pero muchas de las veces ya es demasiado tarde, pues nos percatamos que los muchachos ya están echados a perder o enviciados en las drogas”.
Finalmente la encargada de la casa hogar reconoce que su meta diaria es enseñarles a los muchachos a saber distinguir el bien y el mal, por ellos mismos y se aceptan todas las invitaciones que les hacen estas organizaciones o clubes de servicio, toda vez que se les busca sacar de su rutina, que se relacionen y que conozcan a otras personas, otras formas de pensar.
